Parque del Retiro.

Así estaba ayer el parque,pero hay una triste noticia de la que me enteré el año pasado:el otoño está desapareciendo.
Lo leí en un reportaje sobre medio ambiente: parece ser que ahora como consecuencia del exceso de rayos ultravioletas (el calentamiento del planeta) las hojas ya no se secan de forma paulatina por el proceso metabólico normal que ocurre todos los años en los arboles caducifolios ;ahora las hojas simplemente se queman y eso tiene como primera consecuencia que desaparecen el colorido y los matices del otoño;me fijé ayer y por desgracia es verdad.
Las hojas de los castaños ya no se van volviendo amarillas poco a poco: se queman por los bordes adquiriendo un color tabaco pero no esplendoroso,como antaño al final del otoño ,sino falto de vida y brillo;en la parte central de la hoja sigue el color verde ,pero se intuye que por poco tiempo,ya que acabará quemado como los bordes.
Quizá las fotos que hice hace tres años sean las últimas fotos de los colores del otoño,porque ya el año pasado me fije en que ocurría lo que decía el artículo.
O mejor dicho:me fijé en lo que decía el artículo porque me había dado cuenta de que ya los colores del jardín Botánico no eran los mismos.